- Fecha de publicación: 5 de mayo de 2022
Tiempo de lectura: 8 min.Los actores de las Instituciones de Educación Superior enfrentan el reto de la gestión del tiempo, y las herramientas digitales son sus aliadas.
Índice de Contenido
- 3 consideraciones para la gestión del tiempo en la educación digital
1.1 El comportamiento multitarea
1.1.1 La pérdida de concentración
1.1.2 Caída de rendimiento
1.2 Conciencia del tiempo finito
1.2.1 Fecha de caducidad para las tareas
1.2.2 Flexibilidad y definición de prioridades
1.3 Herramientas digitales para la gestión del tiempo
Entre las múltiples habilidades que la educación digital impulsa en la comunidad educativa de las Instituciones de Educación Superior, se encuentra una que es clave: la gestión del tiempo.
En el intento de lograr todas las actividades y compromisos diarios, el agotamiento y la frustración parecen dominar, pero la organización y priorización de actividades hoy tiene como aliadas a las herramientas digitales, aunque no todos se han dado cuenta.
¡Si continúas leyendo, serás parte de los que usen la tecnología en su beneficio!
3 consideraciones para lograr una óptima gestión del tiempo en la era de la educación digital
Cuando se habla de gestión del tiempo, no se trata del control que podría tener cualquier individuo sobre el tiempo, para ajustarlo a sus actividades y necesidades.
La gestión del tiempo se trata, más bien, de la organización y gestión de las actividades propias para el logro de objetivos y metas, considerando el corto, mediano y largo plazo.
Por lo tanto, administrar el tiempo significa tener un alto compromiso con la gestión de nuestras actividades, como un asunto que se encuentra en nuestro poder y decisión.
A veces pensamos que la vida acelerada de estos tiempos nos ha obligado a vivir así, pero la desorganización y estrés generado por el cúmulo de actividades no es un fenómeno externo, no es algo fuera de nuestro control, no estamos imposibilitados de actuar en consecuencia.
La era de la educación digital nos exige ser reflexivos, críticos y muy audaces para entender y apropiarnos de forma creativa de la ola de invenciones y soluciones digitales que están a nuestro alcance.
¿Quieres conocer 3 aspectos que impactan directamente en la gestión de las actividades de cada individuo en tiempos de transformación digital y de pandemia? ¡continúa leyendo!
1. El comportamiento multitarea
Muchas veces experimenté un día cotidiano como una caótica ráfaga de estrés, con múltiples actividades pendientes por hacer, sin control, actuando en automático y, al final del día exhausta y adolorida por todas partes. Y lo peor, sin haber terminado los pendientes.
Cuando explicaba mi ritmo de trabajo, decía “soy multitarea”, el agotamiento me derrumbaba, pero decidía ser indiferente de ello para lograr “ser eficiente”.
Había una incongruencia entre lo que vivía y la justificación que hacía mi mente para continuar con los malos hábitos de mi jornada agotadora.
Estaba inmersa en el mito de la multitarea...
Ser multitarea no es posible, así lo afirman diversos estudios, ya que nuestro cerebro está construido para enfocarse y actuar en una sola actividad a la vez.
La pérdida de concentración
Cuando realizamos de forma simultánea dos o más tareas, la atención se reparte perdiendo concentración. Y en realidad vamos de una tarea a otra con rapidez, intercalando los momentos para cada una de ellas, pensando que nuestro cerebro está enfocado en todas a un mismo tiempo.
Caída de rendimiento
Y lo que estamos haciendo es comprometer el rendimiento de nuestra atención, la cual es un recurso cerebral limitado, porque exigimos a nuestro cerebro manejar una abrumadora cantidad de información al ir de una actividad a otra sin permitir pausas entre estas.
Afirma Strayer en su artículo Cerebro multitarea, que la adecuada sintonía de la atención resulta clave para una cognición sana. Y yo lo descubrí cuando mi cerebro agotado no podía pensar más.
Para lograr todas las tareas que nos proponemos, no necesitamos ser malabaristas cerebrales, necesitamos dar orden y tiempo a cada una de las actividades. Pero ¿cómo lograrlo? Conoce dos pasos importantes:
2. Conciencia del tiempo finito y el proceso para el logro de metas
Vivimos con poca precaución ante la finitud del tiempo, es decir, ante la fecha de caducidad de las cosas. Si bien no pensamos que todo dura para siempre, si actuamos como si la existencia tuviera su fin en un futuro muy lejano.
No somos conscientes de las fechas de caducidad de nuestra energía, nuestra juventud, nuestra salud, de las oportunidades y del tiempo para estar con los que queremos.
En aquellos días en que sólo trabajaba y trabajaba, en verdad pensaba que en algún momento llegaría el tiempo para estar con mi familia, para ir al médico, para descansar, etc. Pero nunca llegó, un año después me di cuenta de todo lo que me había perdido mientras actuaba siendo “multitarea”.
Descubrí que si no ponía orden a mis hábitos cotidianos de trabajo, la fecha de caducidad de mi salud llegaría antes de lo esperado.
Las tareas necesitan una fecha de caducidad
Así que pedí ayuda para aprender cómo organizar y equilibrar mis tareas y mi vida personal. La clave fue darle un tiempo del día a cada actividad, incluyendo los descansos, las visitas al médico, los tiempos de comida, etc.
Me parecía imposible porque los pendientes me abrumaban, organizaba las actividades y el día no resultaba como lo había planeado, lo que me hacía sentir mucha frustración.
Flexibilidad y definición de prioridades
Entonces la flexibilidad fue mi salvación. Aprendí que el proceso por el que se logran las tareas es uno que se va moldeando día a día, que no existe plan y ejecución perfecta y que todo depende de mi conciencia del tiempo en el aquí y el ahora.
Lo cual quiere decir que en el tiempo presente debo medir las prioridades. Actuar con estrategia en el aquí y ahora y crear momentos breves de descanso, porque en ellos, el cerebro relajará la concentración y encontrará soluciones.
Organizar momentos de concentración específicos para las tareas complejas evitando distractores, en varios días de la semana y sin esperar ansiosamente terminar todo en un mismo día, es un avance importante.
Además, ayuda a tomar conciencia de los propios impulsos que nos saturan de actividades, ya que posiblemente uno mismo es el artífice de su propio caos.
En esta organización, ¿pueden las herramientas digitales ser nuestras aliadas? En las siguientes líneas encontrarás la respuesta.
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3. Herramientas digitales como aliadas de la gestión del tiempo
La tecnología nos ha traído eficientes recursos que hacen más práctica la vida diaria. Sin embargo, es comprensible que en medio del estrés, desorganización y agotamiento no hayamos descubierto cómo puede ayudarnos.
Así como la tecnología se ha involucrado en nuestra cotidianidad para conocer la vida de los demás, viajar o distraernos con videojuegos, así también podemos involucrarla en la gestión de nuestras actividades.
Un calendario digital es un ejemplo de ello, a través de una aplicación en el dispositivo móvil o en la computadora es posible organizar las actividades del día de forma visible, teniendo presentes los tiempos para cada cosa.
Además, te permite planear con detalles, con colores que facilitan la visualización, significado e importancia de cada actividad, así como la edición ante la flexibilidad que conlleva el cambio de planes.
Las alertas y recordatorios obligan al cerebro a hacer un alto, tomar un descanso de 5 minutos, movernos, tomar 3 respiraciones conscientes y continuar con la siguiente actividad.
Un calendario en papel no aporta tantas ventajas, la edición es laboriosa, no hay alertas ni recordatorios y es un objeto extra al viajar o estar en continuo movimiento. A mí me encantan las agendas de papel pero para gestionar el tiempo, las app de calendario me han resultado más útiles.
- La integración de un calendario digital ayuda a la toma de decisiones.
- Tan sólo en un día, la posibilidad de respetar lo planificado estará en tus manos.
- Ayuda a enfocar más tu productividad.
- Ayuda a respetar las pausas, dando descanso a tu cerebro para vivir el aquí y el ahora.
- Te ayuda a ser más flexible ante circunstancias imprevistas.
Con una sencilla herramienta como lo es un calendario digital, se da un paso contundente en el manejo de la tecnología como aliada de la gestión del tiempo, porque al encontrarse en el dispositivo móvil es un accesible motivador a ser conscientes del tiempo presente, del orden y de la organización eficiente de cada día.
Deseo que en tus primeros pasos de gestión del tiempo con un calendario digital, puedas comenzar a disfrutar más del tiempo para ti, para tu aprendizaje y para el logro de tus metas.
Otra herramienta muy útil es una Biblioteca virtual, disponible en el dispositivo móvil y con un lector en voz alta. Sin duda, es la herramienta más maravillosa que puede existir porque tus metas de aprendizaje se vuelven realidad en corto tiempo sólo escuchando.
Pero de esta herramienta, hablaré en otro post, ¡no te lo vayas a perder! ¡Hasta la próxima!
Referencia
Strayer y Watson (2013) El cerebro multitarea. En Mente y cerebro, Núm. 61.
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